ADUANA: UNA EXPERIENCIA CON PASIÓN Y MARCA PERSONAL.

Siempre hemos oído la expresión de Madrid al cielo ( y desde el cielo, un agujerito para verlo). Pues así empezaba nuestra experiencia gastronómica con vistas inmejorables de la Plaza de Colón y la Biblioteca Nacional. Y te vamos adelantando que colón y sus descubrimientos estarán bien presentes en los fogones de este restaurante con alma propia.

Os ubicamos, planta séptima del Hotel Gran Melia Fenix, comedor para 22 comensales y terraza para 18 más, no hay excusas para no ir con amigos y disfrutar de la fantástica experiencia #Gastro. Te aseguramos que después de leer este artículo se convertirá en necesidad.

pics @lycland @granmelia

De la mano del Chef Miguel Martín, fuimos introduciéndonos en el corazón de Aduana, y para abrir boca nos inició en esta experiencia con un Sashimi de Sandía que apareció ante nosotros con un maridaje de soja, acompañado de queso Feta y pepino. Por si no era suficiente, el emplatado era soberbio y estaba realizado con el máximo cuidado. Platos frescos para uno de los últimos días de verano en la capital.

pic @barbireando

Continuamos con una Ostra Rockefeller, un guiño al multimillonario Jhon D. Rockefeller. Las Ostras Rockefeller representan uno de los platos más emblemáticos del mundo gourmet. Fueron creadas en el restaurante Antoine’s, de Nueva Orleans, en 1899, en honor del multimillonario John D. Rockefeller, no porque él deseara comerlas, sino porque “son intensas, fuertes y ricas como Rockefeller”. Se comenzaron a preparar porque era difícil conseguir Escargots de Francia en aquellos años y las ostras eran fáciles de obtener. Servida con un machado de puerro, ajo, espinacas y gratinadas en una resistencia salamandra y muy bien acompañada de un maridaje de Champagne Moet & Chandon, ¡Casi nada lo que disfrutamos!.

Terminamos las entradas con una Créme Brûleé de foie con trufa, polvos de kikos, azúcar caramelizada y fresa deshidratada. Una exquisitez acompañada de pan tostado que nos regaló una fiesta en boca.

Y llego el momento de los platos principales ¡Sí, aquí tenemos para rato! y en primer lugar una Causa Limeña con aires peruanos. Atún rojo crudo recubierto con algas y tempura bien acompañado de puré de patata con pimientos amarillos y pico de gallo, todo ello acompañado de una de una espuma de chili .Ni falta hace que os digamos lo armonioso de este plato, sabor inmejorable y un placer para la vista que aunaba el Atlántico con el Mediterraneo. El bocado del atún se derretía en nuestra boca generando una explosión de color y sabores, todo ello maridado con aires de nuestro querido Cádiz y de la mano de Bodegas Barbardillo.

Y pensábamos que ya no nos podían sorprender más cuando apareció el plato de carne, una claro homenaje a la ciudad de Madrid inspirado en sus verbenas populares. Compuesto por pluma ibérica cocinada a baja temperatura con salsa teriyaki. Mahonesa de aceitunas, guindillas, manzana baby y chalota caramelizada, con un toque que nos dejó con la boca abierta, ¡polvo de palomitas! Una sorpresa que no pasaba desapercibida. Maridamos con tinto de Aranjuez, apoyando los vinos de la Comunidad de Madrid de la Finca el Regajal.

Para terminar y dejarnos con la boca abierta, el chef Miguel Martín nos sorprendió con Bombones de oro rellenos de naranja, sobre cama de coulis de vino tinto y tierra de sésamo negro y blanco. La explosión del bombón en la boca era realmente tan emocionante como si hubiéramos descubierto America nosotros mismos.

Gran ilusión nos hizo conocer personalmente al Chef Madrileño Miguel Martin, un gato de Carabanchel que se define autodidacta y desde muy pequeño empezó por el gusto de la cocina. Un chef jóven que en todo momento idemuestra a través de sus platus su pasión por la cocina. Como os adelantábamos en el titular del artículo, si unes pasión y vocación, obtienes una cocina con alma propia. Esperamos sinceramente que siga investigando nuevas formas de cocina y nuevos platos a través de las experiencia que viva este magnífico chef, porque sin duda, es grande, como su gusto por el servicio y las cosas bien hechas.

Gracias de corazón por esta experiencia y a @barbireando @gmelia_Fenix @lycland y @noah_Waldorf por las fotografías y la experiencia.